1.
La estrategia de la distracción
El elemento primordial del control social es la
estrategia de la distracción que consiste en desviar la atención
del público de los problemas importantes y de los cambios decididos
por las élites políticas y económicas, mediante la técnica de
continuas distracciones y de informaciones insignificantes.
2.
Crear problemas y después ofrecer soluciones
Este método también es llamado
“problema-reacción-solución”. Se crea un problema, una
“situación” prevista para causar cierta reacción en el público,
a fin de que éste sea el mandante de las medidas que se desea hacer
aceptar. Por ejemplo:, u organizar atentados sangrientos,
3.
La estrategia de la gradualidad
Para hacer que se acepte una medida
inaceptable, basta aplicarla gradualmente, a cuentagotas, por años
consecutivos. Estado mínimo, privatizaciones, , flexibilidad,
desempleo en masa, salarios que ya no aseguran ingresos decentes,
tantos cambios que hubieran provocado una revolución si hubiesen
sido aplicadas de una sola vez.
4.
La estrategia de diferir
Otra manera de hacer aceptar una decisión
impopular es la de presentarla como “dolorosa y necesaria”,
obteniendo la aceptación pública, en el momento, para una
aplicación futura. Es más fácil aceptar un sacrificio futuro que
un sacrificio inmediato. Primero, porque el esfuerzo no es empleado
inmediatamente. Luego, porque el público, la masa, tiene siempre la
tendencia a esperar ingenuamente que “todo irá mejorar mañana”
y que el sacrificio exigido podrá ser evitado. Esto da más tiempo
al público para acostumbrarse a la idea del cambio y de aceptarla
con resignación cuando llegue el momento.
5.
Dirigirse al público como criaturas de poca edad
La mayoría de la publicidad dirigida al gran
público utiliza discurso, argumentos, personajes y entonación
particularmente infantiles, muchas veces próximos a la debilidad,
como si el espectador fuese una criatura de poca edad o un deficiente
mental.
6.
Utilizar el aspecto emocional mucho más que la reflexión
Hacer uso del aspecto emocional es una técnica
clásica para causar un corto circuito en el análisis racional, y
finalmente al sentido critico de los individuos. Por otra parte, la
utilización del registro emocional permite abrir la puerta de acceso
al inconsciente para implantar o injertar ideas, deseos, miedos y
temores.
7.
Mantener al público en la ignorancia y la mediocridad
Hacer que el público sea incapaz de comprender
las tecnologías y los métodos utilizados para su control y su
esclavitud. “La calidad de la educación dada a las clases sociales
inferiores debe ser la más pobre y mediocre posible, de forma que la
distancia de la ignorancia que planea entre las clases inferiores y
las clases sociales superiores sea y permanezca imposibles de
alcanzar para las clases inferiores (ver ‘Armas silenciosas para
guerras tranquilas)”.
9.
Reforzar la autoculpabilidad
Hacer creer al individuo que es solamente él
el culpable por su propia desgracia, por causa de la insuficiencia de
su inteligencia, de sus capacidades, o de sus esfuerzos. Así, en
lugar de rebelarse contra el sistema económico, el individuo y se
culpa, lo que genera un estado depresivo, uno de cuyos efectos es la
inhibición de su acción. Y, sin acción, ¡no hay revolución!
10.
Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen
En el transcurso de los últimos 50 años, los
avances acelerados de la ciencia han generado una creciente brecha
entre los conocimientos del público y aquellos poseídas y
utilizados por las elites dominantes. Gracias a . El sistema ha
conseguido conocer mejor al individuo común de lo que él se conoce
a sí mismo.